Me gusta hacer comidas típicas de cualquier parte del mundo, pero especialmente de la República Mexicana y confieso que más me gusta hacer del sur – sureste de mi país, que son los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo yYucatán, pues casi tienen el mismo tipo de comida que
es la que hacía mi mamá y mi Mamá Ia o sea mi abuela.
Este sabor es con el que crecí, es la comida salada
y dulce y los postres dulces salados. Una
comida salada y dulce es como por ejemplo los platanitos rellenos de mariscos o
picadillo, y las empanadas de atún preparado con cebolla, jitomate y chilito,
que después de fritas se pasan por azúcar.
Y sobre los postres podemos poner de ejemplo las chancletas que son
chayotes espinudos rellenos del mismo chayote con mantequilla y azúcar.
Los postres de esta región son muy sencillos. En el mercado suelen vender unos panes
redondos o cuadrados que se llaman penetelas o marquesotes, según el lugar, y
que se utilizan como los panes para los pasteles. Solo lo parten, los rellenan y los decoran y
quedan buenísimos. También se pueden
hacer en postres diferentes.
Una sola receta de panetela o marquesote no existe,
hay muchas y algunas quedan mejor que otras o depende de la persona que la haga
pero yo tengo una que siempre queda bien y con esta panetela elaboraré un
postre chiapaneco que es delicioso.
El chimbo, es una panetela embebida en un jarabe
con especias. Es muy rico y muy fácil.
Después de mucha charla, que les parece que
pongamos manos a la obra y preparemos este postre chiapaneco. Pero primero hagamos la panetela más fácil
del mundo. A trabajar…
Chimbo
6 huevos
120 gramos de azúcar
1 cucharadita de vainilla
150 gramos de harina cernida
1 cucharadita de polvo para hornear
Para el jarabe
1 litro de agua
400 gramos de azúcar
1 rama de canela
1 limón
120 gramos de azúcar
1 cucharadita de vainilla
150 gramos de harina cernida
1 cucharadita de polvo para hornear
Para el jarabe
1 litro de agua
400 gramos de azúcar
1 rama de canela
1 limón
3 pimientas gordas
2 clavos de olor
½ taza de mezcal
½ taza de mezcal
Para el jarabe, calienta el agua en una olla a fuego
medio y disuelve el azúcar. Agrega la canela y el limón entero, con dos o tres cortes,
pero sin que se desprendan, los clavos de olor y las pimientas gordas. Retira
del fuego, cuela y agrega el mezcal. Revuelve bien y deja reposar. Reserva.
Bate los huevos, clara y yema, en la batidora a velocidad
alta. Agrega el azúcar en dos tantos sin dejar de batir, y continúa batiendo
hasta formar picos con la mezcla. Retira de la batidora, vierte encima la
vainilla y agrega la harina cernida con el polvo para hornear en forma
envolvente. Vacía la mezcla a un molde previamente engrasado y enharinado. Hornea
a 180 ºC hasta que esté cocido, ligeramente dorado y que al insertar un palillo
en el centro éste salga limpio. Deja enfriar y corta. Vierte el jarabe sobre el
chimbo en cuatro tantos, dando tiempo a que el pan absorba el líquido antes de
verter más jarabe