domingo, 23 de noviembre de 2014

Otro gran invento de la pastelería, la pasta de hojaldre

Casi todos conocemos la pasta de hojaldre.  Sabemos que el pastel mil hojas se hace con pasta hojaldrada.

Se le llama mil hojas pues después de su cocción, si está bien elaborado, la masa se separa en finas y crujientes hojas.  Esto es porque la grasa se queda atrapada entre las capas de harina y cuando las horneamos se derrite y forma esas bellas separaciones y ese crujiente extraordinario.

Sobre el origen del hojaldre se dice que por el año de 1613 fue el confitero y pintor Claude Gelée, Le Lorrain (1600-1682) cuando trabajaba como aprendiz de pastelero quiso preparar un pastel especial para su padre enfermo y al olvidar poner la materia grasa a la masa para meter al horno, se la puso en medio y empezó a estirar y a doblar y a estirar hasta que ya no se notaba mucho, aparentemente.  Al hornear fue una grata sorpresa ver que en la pasta que había horneado se habían formado capas.  No dijo nada al dueño de la pastelería y en secreto siguió desarrollando la técnica de esta pasta.

La pasión de Claude Gelée Le Lorrain era la pintura pero al no poder satisfacer sus inclinaciones de pintor por su extrema pobreza fue colocado de aprendiz de pastelero en su pueblo natal.  Fue un dedicado aprendiz y después pastelero pero siempre tenía la intención de pintar y en sus ratos libre se dedicaba a pintar.

Y aquí es donde empieza la leyenda de la creación de la pasta de hojaldre.  Al desarrollar esta pasta para su padre enfermo no le quiso decir nada a su patrón y cuando murió su patrón Claude Le Lorrain se marchó a Nancy y ahí perfeccionó su pasta.  Pero su nuevo patrón lo despreció a él y a su creación.  Por lo tanto con su compañero de trabajo se fue a Florencia con el hermano de éste.  Tanto fue el éxito de los hermanos Mosca que tuvieron que abrir tres pastelerías para satisfacer la demanda.  El único que sabía hacerla era Claude y los hermanos vieron la forma de conseguirla hasta que lo lograron.  Al tener la receta pagaron a unos malandrines para que hicieran prisionero y dejaran morir a Claude.   Y así los hermanos Mosca se erigieron como los inventores de la pasta hojaldrada. 

Pero después de estar prisionero y con casi nada de alimento, empezó a inspeccionar en donde estaba prisionero y se pudo escapar.  Logró llegar a Nápoles y ahí perdió el sentido.  Al despertar se encontraba en una mullida cama y estaba bien cuidado y alimentado. Su benefactor era el pintor alemán originario de Colonia Gottfried Wals con quien estuvo como discípulo de 1619 y hasta 1625 donde salió para ir a Florencia.  Ahí se encontró con la noticia que las pastelerías de los hermanos Mosca se habían incendiado.  Si alguna vez tuvo deseos de venganza en ese momento se le olvidó y siguió dedicándose a la pintura en donde logró cosas maravillosas. Trabajando para algunos afamados nobles entre ellos los que serían los Papas Alejandro VII y Clemente IX.

Con referencia a la pasta de hojaldre sabemos que el gran cocinero Carême continuó con la obra de Claudio creando con la pasta de hojaldre el Vol-au-vent, y el gran pastelero Feuillet, el “Mille-feuilles” o “Mil Hojas” y así sucesivamente siendo los pasteles y pastelillos confeccioniados a base de la delicada y laboriosa pasta de hojaldre.


Hojaldrado de queso azul, tomate y tomillo

200 gr de pasta de hojaldre
4 cucharadas de crema espesa
10 jitomates cherry
100 gr de queso azul
4 rebanadas delgadas de cebolla
2 cucharaditas de tomillo fresco o seco
Sal y pimienta al gusto
1 yema de huevo para barnizar

Precaliente el horno a 200°C.  Extienda la pasta de hojaldre y corte cuatro cuadros y acomode en una charola para horno.  Extienda una cucharada de crema espesa en el centro de cada cuadro. Sobre la crema ponga el queso azul desmenuzado.  Acomode una rebanada de cebolla, ponga 2 ½ tomates en cada cuadro de hojaldre.  Sazone con sal y pimienta al gusto. Esparza las hojas de tomillo. Barnice las orillas y ponga al horno por 15 – 20 minutos o hasta que esté dorado. Retire del horno y sirva con ensalada y aderezo al gusto.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario