viernes, 8 de mayo de 2015

Los colchones de naranja se hacen con levadura.


Se le llama levadura a cualquiera de los diversos hongos microscópicos unicelulares que son importantes por su capacidad para realizar la descomposición mediante fermentación de diversos cuerpos orgánicos, principalmente los azúcares  o hidratos de carbono, produciendo distintas sustancias. Suelen estar unidos entre sí formando cadenas.  Producen enzimas capaces de descomponer diversos sustratos, principalmente los azúcares.

Una de las levaduras más conocida es la que tiene la facultad de crecer en forma anaerobia realizando fermentación alcohólica.  Por esta razón se emplea en muchos procesos de fermentación industrial, de forma similar a la levadura química, por ejemplo en la producción de cerveza, vino, hidromiel, pan, antibióticos, etc.

La levaduras se reproducen asexualmente por gemación o brotación y sexualmente mediante ascosporas o basidioesporas.  Durante la reproducción asexual, una nueva yema surge de la levadura madre cuando se dan las condiciones adecuadas, tras lo cual la yema se separa de la madre al alcanzar un tamaño adulto.  En condiciones de escasez de nutrientes las levaduras que son capaces de reproducirse sexualmente formarán ascosporas.  Las levaduras que no son capaces de recorrer el ciclo sexual completo se clasifican dentro del género Candida.

Bueno, ya que todo este bla, bla, bla es muy cansado mejor hagamos los colchones de naranja que están deliciosos y aunque parecen laboriosos, son muy fáciles.

Colchones de naranja

300 gr de harina
30 gr de azúcar
½ cucharadita de sal
1 huevo
140 gr de mantequilla fundida
2 cucharaditas de levadura
1 naranja, jugo y ralladura
100 ml de leche tibia
Mantequilla fundida extra para barnizar

En la mesa ponga la harina, forme un hoyo en el centro y ponga la azúcar, sal, huevo, mantequilla fundida, ralladura, jugo y leche tibia, la levadura espolvoréela sobre la harina.  Empiece a amasar con los dedos o con un tenedor.  Amase hasta que todo se integre, alrededor de 5 – 7 minutos.  Deje reposar.
Precaliente el horno a 200°C y engrase ligeramente un molde rectangular de 30 x 20.
Divida la masa en porciones de 50 gr aproximadamente.  Bolee cada porción y acomódelas en el molde, separados uno de otro.  Acerque al horno y deje que la masa doble su volumen.  Hornee de 20 – 25 minutos. barnice con la mantequilla. Sirva.



viernes, 1 de mayo de 2015

Celebremos con Galletas Holandesas


La cocina de los Países Bajos se caracteriza por el consumo en grandes cantidades de pan y papas tal y como lo sugiere el pintor neerlandés Vincent van Gogh en su cuatro titulado “los comedores de papas”.

La cocina de Holanda es muy conocida también por los quesos como el Gouda, Edam y Leyden.  Muchas de las ciudades en el este de Holanda tienen sus propios quesos, algunos de ellos distinguibles solo por el sabor y por su apariencia exterior.

En Holanda es muy popular una tostada (galleta tostada) redonda untada con mantequilla: el beschuit que se suele comer como desayuno, con diferentes sabores y que se emplea también en diferentes celebraciones.  Una de esas celebraciones es el nacimiento de un bebé, en cuanto el niño nace se dan estás galletas a los que van a visitarlos.

Las galletas tradicionales son redondas, yo hice una grande que corté en cuadros, pero el sabor es inigualable.




Galletas Holandesas

Masa:
300 gr de harina
1 cucharadita de canela molida
½ cucharadita de polvo para hornear
100 gr de azúcar
170 gr de mantequilla fría cortada en cubitos
Cobertura:
100 gr de almendras fileteadas
50 gr de azúcar
½ cucharadita de canela molida
Agua

Precaliente el horno a 175°C y prepare una charola de horno forrando con papel de horno o con papel aluminio, y engrasándolo ligeramente.
En un procesador ponemos la harina, la canela, el polvo para hornear y el azúcar y procesamos.  Mientras el procesador esté funcionando agregue la mantequilla poco a poco hasta que la mezcla tenga la textura de arena fina.  Vierta la masa en la charola y con la manos vaya presionando la masa hasta que esté toda adherida y unida, con un rodillo alise la superficie para que quede pareja de todas partes.
Haga la cobertura mezclando todos los ingredientes.
Barnice con el agua la masa que está en la charola y vierta la cobertura, procurando que quede pareja y presione para que se pegue bien a la masa.
Hornee por 25 – 30 minutos o hasta que esté dorada y firme.  Retire del horno y antes de que se enfríe corte con un cuchillo de sierra en rectángulos o rombos.