El caramelo es un alimento preparado a base
generalmente de azúcar que se cuece. Puede consumirse tanto líquido como
sólido.
El caramelo sólido se consume dejándolo deshacer en
la boca. A estos se les añade sabores
diferentes como pueden ser de frutas, hierbas u otro aroma. También existen caramelos sin azúcar, que se
preparan con edulcorantes que consiguen un sabor dulce.
Desde siempre el ser humano ha tenido necesidad de
encontrar alimentos ligeros y que proporcionaran energía para sus largos
viajes. Los que tenían en la antigüedad
son dulces a base de sustancias como la miel, el jengibre, el regaliz o la
lactosa ya que no se conocía el azúcar que nosotros utilizamos.
Pero todo esto es de los caramelos que aquí en
México los conocemos como “dulces”, no, no son de estos dulces de los que prepararemos hoy, sino del caramelo que utilizamos para hacer flan.
Pero ahora no haremos flan, sino helado, un delicioso helado de caramelo.
Helado de caramelo
200 gr de azúcar
1 litro de leche
6 yemas de huevo
100 gr de azúcar
20 gr de maizena
½ taza de agua
30 gr de mantequilla sin sal
Disuelve los 200 gr de azúcar en una olla y deja
que se haga un caramelo dorado. Cuando esté hecho el caramelo vierta con mucho
cuidado el litro de leche. Mientras revuelva el azúcar restante con la maizena
y disuelva en la ½ taza de agua. Bata las yemas hasta que estén ligeramente
esponjosas.
Cuando la leche hierva, agregue el azúcar y la
maizena disuelta en agua y mueva constantemente para que no se pegue ni se
formen grumos. Cuando esté a punto de
hervir añada las yemas batidas y bata para que no se formen grumos. Cuando esté espeso, pero sin que hierva,
retire del fuego. Añada la mantequilla y mueva para que se integre bien en la
mezcla.
Vierta en un molde para que se enfríe y
refrigere. Cuando esté completamente
frio ponga en la máquina de helado. Congele.
