viernes, 6 de marzo de 2015

Un postre muy ligero, gelatina de limón con leche.




La leche evaporada es un lácteo que siempre fue ofrecido enlatado pero ahora también hay en tetra brick.  Este lácteo soporta grandes períodos de almacenamiento por el proceso de “deshidratación” realizados a la leche cruda, a la que se le ha quitado cerca de un 60% del agua existente en la leche.

Aunque se le conoce como leche evaporada su nombre real es el de leche parcialmente evaporada o semi-evaporada ya que en su proceso de elaboración se le ha quitado cerca de un 60% del agua existente en la leche, no el 100%. 

La leche evaporada así como otros alimentos en conserva o enlatados se originaron a partir de los experimentos realizados por el científico francés Nicolás Appert aunque fue el mismo Marco Polo el que pudo observar como en Mongolia se ponía leche al sol para que sufriera un proceso de evaporación y de esta manera aumetnar su período de conservación. 

El 14 de junio de 1885 se creó la primera empresa dedicada a la producción de leche evaorada “Highland Evaporated Cream”.

Antes de que existieran y proliferaran los refrigeradores domésticos, la leche evaporada era muy popular ya que era un sustituto de la leche que podía soportar grandes períodos de almacenamiento y que para su consumo bastaba tan solo añadir agua.  En la actualidad este producto se emplea en la repostería casera. 

El período de almacenamiento de la leche evaporada puede ir desde semanas hasta meses, dependiendo de los procesos y de la marca del producto. 


Gelatina de leche evaporada y limón

1 lata de leche evaporada refrigerada
1 caja de gelatina de sabor limón
2 limones
5 cucharadas de azúcar
1 taza de agua caliente
1 taza de azúcar para el caramelo

En una ollita ponga el azúcar del caramelo y deje que se haga, vacíen en el molde en el que va a poner la gelatina, reserve.  En un tazón ponga el agua caliente y disuelva la gelatina y las cucharadas de azúcar, agregue el jugo de los limones.  Revuelva bien y deje que se enfríe completamente.

En la licuadora bata la leche evaporada y vacíe a la mezcla de la gelatina.  Vierta en el molde con el caramelo. Refrigere hasta que se cuaje perfectamente, alrededor de 3 – 4 horas.  Desmolde y sirva. 




miércoles, 4 de marzo de 2015

Deliciosa rosca despeinada de miel y canela.



La miel es un líquido dulce y viscoso producido por las abejas a partir del néctar de las flores o de secreciones de partes vivas de plantas o de excreciones de insectos chupadores de plantas.  Las abejas lo recogen, transforman y combinan como la enzima invertasa que contiene la saliva de las abejas y lo almacenan en los panales donde madura.

La intervención del hombre en el proceso de explotación de los panales de la colmena es conocida como apicultura.

Las características físicas, químicas y organolépticas de la miel vienen determinadas por el tipo de néctar que recogen las abejas.  El origen de las mieles define también la mayor o menor facilidad de éstas a cristalizar.

Los principales países productores y exportadores de miel son China, Argentina, España, México, Canadá, Hungría y Australia.  Los principales países importadores de miel a nivel mundial son la Unión Europea y Estados Unidos.

Pero dejemos de hablar de la miel, que tal si hablamos ahora de esta rosca despeinada que está rellena de canela y bañada con miel.  Esta deliciosa, no importa que nos despeinemos.



Rosca despeinada de canela y miel

Masa:
2 huevos
1 cucharada de levadura seca
2 cucharadas de azúcar
200 ml de leche tibia
50 gr de mantequilla derretida
500 gr de harina
½ cucharadita de sal
1 naranja, su ralladura
1 huevo batido para barnizar
Relleno:
75 gr de mantequilla derretida
4 cucharadas de azúcar
1 cucharada de canela en polvo
Almíbar
½ taza de miel
100 ml de agua

En el tazón de la batidora ponga los huevos, el azúcar, la leche tibia, la mantequilla derretida, la sal, la ralladura, la harina y al final ponga la levadura.  Amase y agregue mas leche tibia si la mezcla está muy seca.  Amase por 10 minutos en la amasadora o 20 minutos a mano.  Deje reposar hasta que doble su volumen.
Estire la masa y palotee hasta formar un rectángulo con ella. Barnice con la mantequilla derretida del relleno y esparza la azúcar y la canela.  Enrolle y forme una rosca y coloque en una charola para hornear engrasada.  Corte con unas tijeras rebanadas de la rosca pero sin llegar a separarlas.  Tome una porción y tuerza al centro de la rosca, la siguiente deje de ese lado y así toda la rosca.
Precaliente el horno a 180°C y coloque la charola cerca del horno, deje que leve por 20 minutos aproximadamente o hasta que doble su volumen y barnice con el huevo batido. 
Prepare el almíbar hirviendo el agua con la miel por 8 minutos aproximadamente.
Hornee por 30 – 35 minutos  y retire del horno, bañe con el almíbar toda la rosca y regrese al horno por otros 5 – 8 minutos.  Retire del horno y deje enfriar.  Sirva tibio o frío.




martes, 3 de marzo de 2015

Unas ruedas de pechuga de pavo que nos llevan al paraíso.




La domesticación del pavo se produjo alrededor del comienzo del primer milenio de nuestra era y fue por los pueblos indígenas de las regiones centrales de México.  El tipo empleado fue el guajolote o pavo salvaje mexicano, una subespecie del pavo salvaje común que vive en los bosques de México y en los Estados Unidos.  Esta subespecie habitaba en las montañas de la meseta este y central de Mexico, en los estados de Veracruz, Guerrero y Jalisco.

Utilizaban su carne y huevos como fuente de proteína.  También utilizaban las plumas con fines ornamentales.  Los aztecas asociaron al pavo con su dios Tezcatlipoca.  Posteriormente, en el año 1498, los conquistadores españoles de regreso a Europa llevaron consigo pavos domesticados, con el nombre de gallinas de Indias, con lo cual se inició su reproducción en ese contienente.  Primero en España y luego en otros países, en donde en casi  todos desarrollaron razas propias.  Así sería seleccionado por siglos, consiguiéndose aves de carne apetecible, rápido creciiento y gran tamaño corporal.

A Inglaterra llegaron en el año 1521 desde Turquía, razón por la cual al pavo se le denomina en inglés turkey.  Los ingleses lo repatriaron a América al introducirlo en sus colonias de América del Norte.  Allí, en la región de Nueva Inglaterra crearon la “raza Bronceada” mediante cruzas entre el pavo doméstico y la subespecie salvaje que habitaba en los bosques de los montes Apalaches.

Pero, por qué comer pavo solamente en las fiestas decembrinas, lo podemos comer todo el año, además es bajo en colesterel y por sobre todo es muy rico.


Pechuga de pavo rellena

1 pechuga de pavo de 1½ - 2 kilos
200 gr de jamón serrano
300 gr de queso suizo o gruyere
1 ½ taza de arándanos
1 taza de frutos secos al gusto (nueces, pistachos, almendras)
2 tazas de vino blanco
1 ramito de tomillo
Sal y pimienta blanca
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de harina

Abra la pechuga formando un rectángulo, sazone con sal y pimienta, ponga una capa de jamón serrano, encima una capa de queso, una capa de arándanos y por último de los frutos secos que utilice.  Enrollo cuidadosamente y amarre para que no se rompa.  Ponga a cocer en una olla con 1 taza de agua, el vino y sal o consomé y unas hojitas de tomillo.  Deje cocer por 40 minutos aproximadamente o hasta que esté cocido.  Retire del caldo y deje enfriar por completo para que se pueda rebanar.  Rebane los medallones y acomode en un platón.  Sirva bañado en la salsa o con la salsa en un lado.
Mientras tanto, en una ollita ponga la mantequilla a que se derrita y fría el resto de los arándanos  y agregue la harina para hacer un roux, cuando esté dorado, agregue el caldo colado y mueva para que no se formen grumos.  Deje que se cueza.  Cuando esté espeso, retire del fuego.  Sirva esta salsa sobre los medallones de pavo relleno.




lunes, 2 de marzo de 2015

Para días fríos, una sopa reconfortante de coliflor.



Cuando mis hijos eran pequeños estaba yo dispuesta a que comieran de todo tipo de verduras, de todo tipo de fruta, de todo tipo de carne, en fin de todo tipo de comida.

Pienso que eso fue todo un éxito pues afortunadamente comen de todo, aunque lo que nunca logré fue que comieran la grasita que viene en la carne aunque en realidad eso es bueno por la grasa del colesterol.

Fue una labor muy ardua pero lo conseguí.  Todos los días les ofrecía tres verduras diferentes de las cuales tenían que escoger dos para comer ese día y la otra solamente la tenían que probar.  Por lo general una de las verduras era la que les encantaba, la otra la comían y la tercera no les gustaba para nada. Al día siguientes era la que les gustaba y dos que odiaban, bueno se las iba manejando y al cabo de los años, puedo decir que les enseñé a comer de todo, lástima que ya grandes afloraron sus amores por las verduras pues hay algunas que ya no se comen.

Recuerdo que cuando íbamos a casa de unos familiares, mi primo político se maravillaba de que a tan temprana edad mis hijos comieran coliflor y brócoli, pues a veces ni a los adultos les gustan estos vegetales. 

Bueno, como estos días están fríos, y yo tenía ganas de una sopa que fuera muy reconfortante entonces me encontré con esta sopa que está deliciosa.

Sopa reconfortante de coliflor

2 cucharadas de aceite de oliva
½ cebolla en cubos
½ poro en cubos
1 zanahoria en cubos
2 tallos de apio en cubos
2 dientes de ajo picados
1 cucharadita de tomillo
4 litro de caldo de vegetal o de pollo o agua
½ cabeza de coliflor en piezas
1 taza de leche o crema
Chorizo o tocino frito para decorar
Sal y pimienta al gusto

Caliente el aceite en una olla y ponga la cebolla, el poro, la zanahoria, el apio y el ajo y deje que se sofría, agregue el tomillo y el agua o caldo y deje que se cueza completamente. Licúe las verduras y vuelva a la olla.  Añada las flores de coliflor y sazone al gusto.  Agregue la crema o leche, deje que se caliente y sirva adornado con el chorizo o el tocino.




domingo, 1 de marzo de 2015

Pan de chocolate y naranja, una combinación soberbia.





El chocolate procede de un árbol al que se le llama popularmente cacao cuyo nombre elegante es teobroma cacao.  Por regla general se denomina chocolate al producto final del procesado del cacao. 
                     
El árbol de cacao es originario de Mesoamérica, lugar donde se comenzó a domesticar.    El cultivo del cacao y su consumo hicieron que el chocolate fuese adquiriendo relevancia social, religiosa, medicinal, política y económica en diversas sociedades.  Su propagación, aceptación y difusión a lo largo del mundo es tal, que en la actualidad no existe región donde no haya llegado su influencia.  Su consumo y posterior producción involucra a millones de personas, así como a varias naciones a lo largo del mundo.  Inicialmente fue consumido por los Olmecas de Mesoamérica, hace tres mil años, como bebida alcohólica y posteriormente empleado como moneda por los Mayas, trasladándose de ahí al Imperio Azteca.  Durante la época del declive de estas culturas precolombinas, y comenzada la conquista de América, tras la conquista de México el conocimiento del chocolate llega a Europa mediante el monopolio inicial creado por España sobre el comercio del cacao. 

En España cambia la fórmula inicial, se le endulza con azúcar de caña y aromatiza con canela, logrando inicialmente una gran aceptación social.  El chocolate es el alimento originario de América, que, comparativamente con otros, se incorpora con mayor popularidad en la sociedad europea del siglo XVII.  De España pasa a Francia e Italia.  A Francia debido a la corte francesa de influencia española y en el caso de Italia por las redes conventuales y religiosas de la época.  Poco a poco se iría extendiendo su consumo a lo largo de todos los países europeos y asiáticos y el cultivo del cacao tomando posesión de África.

Bueno, basta de plática, hagamos este delicioso pastel de chocolate con naranja.

Pastel de chocolate con naranja

200 gr de mantequilla suavizada
1 ¼ tazas de azúcar moscabado
3 huevos
1 ½ tazas de harina
¾ taza de cocoa en polvo
1 ½ cuchaadita de polvo para hornear
¾ cucharadita de bicarbonato
½ cucharadita de sal
1 ¼ taza de crema
1 taza de chispas de chocolate
1 cucharada de ralladura de naranja
Naranja confitada
½ taza de cáscara de naranja en tiritas
1 taza de azúcar
3 cucharadas de azúcar extras

Precaliente el horno a 160°C y engrase y enharine un molde de rosca.  En un tazón acreme la mantequilla con el azúcar hasta que esté esponjosa, agregue los huevos, añada la ralladura de naranja.  Cierna la harina, la cocoa, el polvo para hornear, el bicarbonato y la sal.  Agregue la harina alternando con la crema.  Incorpore las chispas de chocolate.  Vierta en el molde preparado y hornee por 1 hora aproximadamente o hasta que al insertar un palillo este salga limpio.  Deje enfriar por mínimo 10 minutos y desmolde, deje que se enfríe por completo. 
Mientras tanto, ponga las tiritass de naranja en una ollita con agua suficiente para cubrirlas y ponga a hervir.  Cuando haya hervido cuele y refresque con agua fría.  Ponga a hervir las tiritas de cáscara de naranja en total dos veces.  Habiendo hecho esto, ponga las tiritas de naranja en la misma olla con agua para cubrirlas y con la taza de azúcar.  Ponga a hervir cuidando que no se vaya a hacer caramelo el azúcar.  Cuando ya se haya consumido el jarabe, pero todavía no es caramelo, vierta las tiritas de naranja confitadas en un papel encerado y vierta el azúcar extra sobre ellas.

Para servir el pastel ponga el pan en un platón y decore con las tiritas de naranja.